Instruido en artes, ciencias y otras materias.
Tras años y años de investigación, tras demasiados intentos de conseguir información, tras
gastar grandes cantidades de dinero en inútiles progresos, aquellos científicos que estudiaban
la existencia de universos paralelos, dieron por finalizado el proyecto inexistente y tiraron la
toalla. Era obvio que ese ideal no tenía futuro alguno o eso se rumoreaba allá por el año 2037, como decían aquellas personas con corbata, americana y cómico bigote estábamos en un proceso de evolución magnifico, de hecho, habíamos conseguido encontrar una cura contra el cáncer e inventar numerosos navíos espaciales que nos llevarían a la Luna algún día, o eso es lo que no paraba de oír en televisión. Pero, ¿Habían conseguido erradicar el hambre mundial? ¿Habían conseguido eliminar aquellos conflictos que se cometían por aquellas leyes que lo único que conseguían era llenar sus bolsillos de riqueza? Desde esta perspectiva, la sociedad actual no había evolucionado, ni había dado un paso, ni un sólo paso.
Abrí el maletín que contenía toda su correspondiente búsqueda, plagada de fórmulas y cálculos verdaderamente nulos, habían perdido todo su valor y su lógica, al igual que mi profesión. Mis años universitarios y mi estimado titulo habían acabado en un cubo de basura al igual que todo mi material de trabajo.
Hasta que aquel veterano investigador,de cabellera plateada se levanto de la silla rudamente.
—¡ESPEREN, MIS QUERIDOS COMPAÑEROS! YO TENGO UNA HIPÓTESIS QUE PODRÍA SER LA POSIBLE SOLUCIÓN A ESTA TORTUOSA INCÓGNITA.
Multitud de ojos se clavaron en aquel viejo, aquellos ojos expresaban un brillo de esperanza.
—Llevo más de 20 años en este proyecto, apuntando hasta el mínimo detalle y entrelazando fórmula entre cuestión. Puede sonar algo demente lo que os voy a decir ahora, pero tan solo os pido que escuchéis, esa es mi plegaria.
Y decidimos asentir y poner suma atención en ello.
—Olvidad todo lo que sabéis acerca de los universos paralelos, olvidad todos aquellos números, olvidadlo todo. Hace unas noches estuve reflexionando sobre la relación entre fuerza de atracción y el universo. ¿Y si hubiera una atracción perfecta entre dos cuerpos? No es cuestión de formulación sino de complicidad y coordinación. He estado observando el universo y todos sus cambios, ¿Y si cada 9 años ocurriera un suceso, que crea esa atracción? Como si un rayo proveniente de algún universo paralelo proyectara sobre la Tierra(...)
Tras decir esto un gran numero de empleados tomaron la puerta y se largaron. Apenas quedábamos 5 individuos en aquella habitación semi-vacía, el viejo esbozó una triste sonrisa tras esa sutil barba.
Yo estaba bastante confuso, ya que aquel concepto sonaba delirante y la mayoría lo tomaron por chiflado, yo estaba decido a creerle, aunque fuese un acto ilusorio.
Pero, ¿acaso algo de lo que ocurría al día de hoy no lo era?
gastar grandes cantidades de dinero en inútiles progresos, aquellos científicos que estudiaban
la existencia de universos paralelos, dieron por finalizado el proyecto inexistente y tiraron la
toalla. Era obvio que ese ideal no tenía futuro alguno o eso se rumoreaba allá por el año 2037, como decían aquellas personas con corbata, americana y cómico bigote estábamos en un proceso de evolución magnifico, de hecho, habíamos conseguido encontrar una cura contra el cáncer e inventar numerosos navíos espaciales que nos llevarían a la Luna algún día, o eso es lo que no paraba de oír en televisión. Pero, ¿Habían conseguido erradicar el hambre mundial? ¿Habían conseguido eliminar aquellos conflictos que se cometían por aquellas leyes que lo único que conseguían era llenar sus bolsillos de riqueza? Desde esta perspectiva, la sociedad actual no había evolucionado, ni había dado un paso, ni un sólo paso.
Abrí el maletín que contenía toda su correspondiente búsqueda, plagada de fórmulas y cálculos verdaderamente nulos, habían perdido todo su valor y su lógica, al igual que mi profesión. Mis años universitarios y mi estimado titulo habían acabado en un cubo de basura al igual que todo mi material de trabajo.
Hasta que aquel veterano investigador,de cabellera plateada se levanto de la silla rudamente.
—¡ESPEREN, MIS QUERIDOS COMPAÑEROS! YO TENGO UNA HIPÓTESIS QUE PODRÍA SER LA POSIBLE SOLUCIÓN A ESTA TORTUOSA INCÓGNITA.
Multitud de ojos se clavaron en aquel viejo, aquellos ojos expresaban un brillo de esperanza.
—Llevo más de 20 años en este proyecto, apuntando hasta el mínimo detalle y entrelazando fórmula entre cuestión. Puede sonar algo demente lo que os voy a decir ahora, pero tan solo os pido que escuchéis, esa es mi plegaria.
Y decidimos asentir y poner suma atención en ello.
—Olvidad todo lo que sabéis acerca de los universos paralelos, olvidad todos aquellos números, olvidadlo todo. Hace unas noches estuve reflexionando sobre la relación entre fuerza de atracción y el universo. ¿Y si hubiera una atracción perfecta entre dos cuerpos? No es cuestión de formulación sino de complicidad y coordinación. He estado observando el universo y todos sus cambios, ¿Y si cada 9 años ocurriera un suceso, que crea esa atracción? Como si un rayo proveniente de algún universo paralelo proyectara sobre la Tierra(...)
Tras decir esto un gran numero de empleados tomaron la puerta y se largaron. Apenas quedábamos 5 individuos en aquella habitación semi-vacía, el viejo esbozó una triste sonrisa tras esa sutil barba.
Yo estaba bastante confuso, ya que aquel concepto sonaba delirante y la mayoría lo tomaron por chiflado, yo estaba decido a creerle, aunque fuese un acto ilusorio.
Pero, ¿acaso algo de lo que ocurría al día de hoy no lo era?
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